Talleres de reflexión y proyección de acciones posibles desde el hecho teatral

¿Qué hacemos?

A propósito del teatro para armar…

 

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El Teatro para Armar con Los Calandracas comenzó a implementarse desde 1988 en ámbitos de salud y educación. Imaginada en principio como disparador para presentaciones o actividades docentes, fue constituyéndose en una modalidad de trabajo para la cual se diseñaron talleres de comunicación destinados a generar espacios de reflexión y proyección de acciones posibles a partir de situaciones problemáticas dramatizadas desde el humor.

Como recurso de comunicación, rompe la convención entre un grupo que actúa y un público espectador, comprometiendo a los participantes a resolver las dificultades que presentan las escenas.

Puede considerarse un juego de espejos, donde el grupo participante va construyendo, a través de la repetición y el ensayo de alternativas, una oportunidad de cambio frente a situaciones problemáticas.

El teatro para armar se constituye así en un foro que facilita la interacción, democratizando la comunicación, estimulando la escucha, validando el diálogo.

En una cultura que privilegia el consumo, la comunicación suele entenderse como persuasión, manipulación, venta. Aquí la comunicación rescata su sentido originario de “poner en común”. Los mensajes y las situaciones están dispuestas en el conflicto teatral para ser revisadas, discutidas en grupo, miradas desde la diversidad.

No se proponen “modelos”. Aquí se juegan alternativas en un espacio que contiene y facilita el ejercicio de escuchar, opinar y probar.

El Teatro para Armar hace eje en el grupo que lo convoca para pensar, intercambiar criterios, buscar nuevas respuestas.

Son los participantes los verdaderos protagonistas del teatro foro y quienes asumen el poder de la palabra y el compromiso de la acción.

Probar en la ficción, intercambiar en grupo, dialogar y proponer modificaciones, abre en el imaginario una opción para intentar cambios en la realidad.

En el espacio institucional, se han diseñado propuestas organizacionales que atañen a la intervención para el diagnóstico, la planificación y la evaluación en un proceso de resolución creciente de conflictos.

En este marco, el Teatro para Armar con Los Calandracas ha sido implementado como estrategia de comunicación para el inicio de un proceso de cambio; como disparador para desobturar situaciones estereotipadas; como recurso movilizador en cursos, jornadas y congresos, dada su posibilidad de impacto con grupos numerosos.

Pero fundamentalmente el Teatro para Armar con los Calandracas, es puro teatro, un fenómeno artístico que permite trascender el tiempo y el espacio ficcionales hacia una realidad en transformación creativa, la apertura que alcanzamos cuando se rompen las convenciones y recuperamos nuestra verdadera máscara, nuestra humanidad.

Al principio… es puro teatro!hpim2875

Todo comienza como en el teatro convencional. Cada escena reúne características y dificultades de comunicación habituales en las instituciones (en la escuela, el hospital, el trabajo), entre las personas (en la familia, entre adultos y adolescentes, en la comunidad).

El humor del grotesco subraya las dificultades y permite observar la situación –tal vez conocida y cercana– desde otra perspectiva, con cierta compasión.

La escena no tiene un final satisfactorio. El humor facilita la posibilidad de imaginar cambios en la acción y, sobre todo, en la actitud de los personajes.

En la repetición de cada escena -que reúne la mayor parte de las dificultades en la temática a tratar- los asistentes, en interacción con los personajes, son invitados a ensayar distintas respuestas para una misma situación conflictiva.

Compartir y discutir grupalmente permite visualizar la posibilidad de cambios actitudinales, nuevas formas de comunicación, alternativas que llevan a acordar acciones superadoras. Al mismo tiempo abre un canal de conexión horizontal que facilita la rápida comunicación del grupo participante.

Frente a situaciones autoritarias, los participantes suelen reaccionar… con más autoritarismo. En este espejo, los cambios empiezan desde la platea, desde el tono de voz, desde ponerse en el lugar del otro, ¿qué ofrecer a otro para que pueda aceptar un cambio?

También pueden incluirse en la escena como personaje, proponiendo nuevas actitudes y respuestas. El aprendizaje se construye a través de lo vivencial.

Hay situaciones que parecen repetirse de manera inexorable, modelos instalados, tradiciones y hábitos que llenan de malestar o dolor la convivencia, intoxicando la relación entre las personas.

El estilo grotesco que se ha elegido, permite trabajar temas críticos y proponer desde el prisma del humor, un enfoque diferente para estas situaciones.

LA COMUNICACIÓN

es inversamente proporcional a la violenciahpim2925

Si hablamos desde el principio… busquemos en el diccionario. La Real Academia de la lengua dice que comunicar es “hacer partícipe al otro de lo que uno tiene”. Y toma para esto el origen etimológico de la palabra, el de los viejos griegos que dicen que koinon, koinomatos significa unión íntima, unir, participar. Este origen participativo, horizontal y democrático es el que el Teatro para Armar reivindica desde una metodología donde el eje pasa por las respuestas que podamos construir entre todos a un conflicto presentado en escena. El teatro no existe si no hay conflicto, tensión. El teatro explicita tensiones muchas veces encubiertas en la vida cotidiana. La máscara del teatro contribuye a descubrirlas.

La espontaneidad de la figura del payaso, la máscara de su nariz, la inteligencia del grotesco, facilitan la mirada crítica. Hay complicidad y controversia.

Del “como si…” del juego, se transita al “aquí y ahora” del teatro. Todo está ocurriendo en este momento, lo estamos inventando entre todos, lo modelamos desde nuestra creatividad. Creatividad es también la posibilidad de encontrar nuevas respuestas a las cuestiones más antiguas.

Para estos talleres se convocan grupos numerosos (de 200 a 800 participantes) que a nivel institucional o en jornadas de temas específicos suelen trabajar luego en pequeños grupos elaborando propuestas de acción para su realidad.

Propuestas de Diseño Integrado

La experiencia ha permitido transitar modelos diferentes de acción y de intervención:proyectos intersectoriales, programas educativos,hpim2941 intervenciones para la resolución de conflictos; grupos numerosos (de 100 a 1.200 participantes), grupos etáreos y profesionales homogéneos o heterogéneos, etc.

Las escenas se organizan a partir de un trabajo de indagación con los distintos actores sociales que intervienen en el conflicto planteado. Una vez acordados los ejes y las líneas principales del trabajo (naturaleza y características de la problemática, objetivos, metas, población destinataria, etc.) se inicia el trabajo de elaboración dramática y de creación a cargo del director Ricardo Talento y el grupo de teatro Los Calandracas.

Las propuestas de intervención que se organizan de manera conjunta con los organismos que la solicitan conlleva un trabajo de elaboración previa. Se evalúan metas posibles, códigos, relaciones institucionales, límites. Una intervención de esta naturaleza debe tener siempre presente que las personas conviven antes, durante y después de participar en estas actividades, y que el impacto de su acción debe contribuir a abrir espacios de reflexión que lleven a modificaciones superadoras y no a heridas o conflictos mayores.

Esta es una de las responsabilidades que asume el equipo de trabajo desde el diseño y en el desarrollo de toda la actividad.

Las escenas amplían el distanciamiento con el problema, por el particular estilo con que están narradas, y aumentan el nivel de compromiso en la medida en que se establece un espacio virtual de intercambio y acuerdos.

Quedarnos sólo en el grotesco de las escenas implicaría quedarnos con la violencia, con el conflicto. No podemos separar estas escenas de las posibilidades que ofrece la técnica de modificación de las mismas para hacer evidente que está en nosotros la perspectiva de cambio.

A lo largo de estos años, observamos que no siempre les fue fácil dejar a un lado las inhibiciones y sumarse al juego que el taller proponía: ponerse la nariz roja de payaso e intentar cambios desde el escenario. Ser el médico que trata de escuchar con la paciencia y el respeto necesarios al anciano que trae sus problemas al consultorio; el que, a las dos de la mañana, recibe en la Guardia al chico con la cola humeando por la quemadura de una plancha, y no sólo tiene que atender a ese paciente, sino también contener a su madre y a su hermanita, parte de una familia víctima de la violencia; el que, en un centro de salud, trata de multiplicarse para paliar el déficit de recursos materiales y humanos, cuidando que no se “pierdan” pacientes por una atención inadecuada; o el pediatra que debe ajustar sus diagnósticos para evitar exámenes innecesarios y adecuar su lenguaje para ser comprendido por el paciente.

Los Talleres de Elaboraciónhpim2912

Los talleres de Teatro para Armar tienen continuidad en otros espacios, diversos de acuerdo con el propósito y los objetivos de cada proyecto. A nivel institucional, se implementan talleres de elaboración y acompañamiento, cuya finalidad es enfocar los aspectos críticos de la realidad que atraviesa el grupo destinatario: servicioshospitalarios, escuelas, grupos comunitarios. Se programa, en este caso, encuentros con una frecuencia que considere un tiempo de decantación del impacto del Teatro para Armar. Se implementan allí dinámicasgrupales adecuadas a los objetivos y características del grupo o la institución destinataria. En este espacio surgen habitualmente los aspectos que no emergieron o que no fueron puestos de manifiesto en la inmediatez del teatro.

A partir de su confrontación con la realidad que desean cambiar, se inicia un proceso diagnóstico y de planificación de acciones superadoras posibles y priorizadas.  Se evalúa la posibilidad de compartir La coordinación de estos espacios con profesionales de la misma institución, de acuerdo con las características del grupo, a fin de asumir su propia autonomía en el desarrollo de las acciones que planifica.

Andrea Maurizi

Coordinadora del Teatro para Armar